Por Edwin Manuel García
La mención del Presidente Petro respecto a la eventual necesidad de un proceso constituyente crispó los ánimos de algunos, alteró hasta la histeria a otros y, en todo caso, puso a hablar al país político sobre este asunto. Resulta inexplicable el estremecimiento -y temor- que la sola mención de un proceso constituyente causa en los sectores más conservadores y defensores del establecimiento neogranadino, así como en sectores del llamado «centro» y hasta en ciertas figuras de la opinión pública.
Leer más