Según sostienen varias teorías, el ojo humano distingue más tonos de verde que de cualquier otro color, pues hace millones de años, para adaptarse al medio en el que se encontraba y asegurar así su supervivencia, el ser humano necesitó aprender a diferenciar la vegetación para reconocer a los depredadores.
Inspirados en los partidos verdes de Europa -caracterizados por un amplio enfoque ecológico y ambientalista-, los «verdes» surgieron en Colombia como una ola que pretendía renovar las formas de decir y hacer la política, lo que en la práctica significó poco más que una simple renovación estética y, sobre todo, semiótica, abusando de los clichés de la «alternatividad» y la «independencia», muy a pesar de que sus campañas siguen siendo mayormente financiadas, como todas las demás, por el poder financiero y empresarial del país. Leer más